Apoteósico Ginés que abre la Puerta Grande y notable regreso de Morante a Las Ventas cortando una oreja

Corrida Hispanidad
El diestro Ginéz Marín cortó dos orejas. Foto: EFE

La última de la Feria de Otoño con el regreso tras cuatro años de ausencia de Morante de la Puebla a Madrid en un festejo en el que se lidiaban los toros de la ganadería de Alcurrucén en Las Ventas. López Simón y Ginés Marín completaban el cartel. La corrida de más expectación del ciclo otoñal pone fin a la feria con el festejo de la Hispanidad.

Abrió la tarde Morante de la Puebla recibiendo al toro por verónicas hasta llevar al animal a los medios continuando por gaoneras. Muy buenos fueron los pares de banderillas. Pero lo mejor vendría con la muleta, con suavidad Morante por la derecha toreando con absoluta exquisitez hasta que aguantó el animal unas tres series. Una auténtica delicia verle torear. El sevillano finalizó su obra rematando con una gran estocada un poco baja y fue premiado con una oreja.

Segundo de la tarde para López Simón el que recibió al animal por medias verónicas. Tras un buen par de banderillas de José Chacón. Tras el brindis al tendido al intentar hacer un quite con la muleta fue prendido por el animal. Se recompuso rápidamente y continuó con la faena. Lució varias series ligadas por la derecha de gran valor pero los enganchones del animal hicieron que decidiera abreviar. Finalizó con una estocada entera. Fue ovacionado.

El tercero para Ginés Marin quien se lució con el capote mostrando con mucho gusto varias verónicas en los medios. Con la muleta lo recibió anclado de rodillas por la derecha continuando de pie. Poco a poco fue citándolo por la izquierda luciendo una gran serie en redondo en los medios pero el animal ya no aguantaba y se paraba por ello tuvo que finalizar. Remató con media estocada algo trasera. Ovación.

Morante de la Puebla con su segundo, el más manso de la tarde. Recibió varios pitidos para ser devuelto pero no fueron obedecidos. El de la Puebla intentó todo lo que pudo pero apenas pudo sacarle muletazos desligados. Tampoco tuvo suerte en los aceros, tras varios pinchazos consiguió una media estocada. Silencio.

El quinto para López Simón al que pudo lucirle un par de verónicas, que llevó dos varas en su sitio y por el que debieron desmonterarse sus hombres de plata tras una lidia de arrestos a un animal sin fijeza. El animal era complicado y López Simon no supo entenderlo. Mostró varias series sin decir nada al público hasta que poco a poco el animal se terminó de apagar. Mató con una gran estocada. Silencio.

Cerró la tarde Ginés Marín al que saludó por medias verónicas ajustado a tablas. El animal puso en aprieto a los hombres de plata en banderillas.
Con la muleta Ginés intentó sacarle todo lo que tenía el animal, en los medios fue donde logró el toreo en redondo por la diestra hasta llegar a conectar con el animal. Ginés mostró gran nivel. También a diestras hizo vibrar por su despaciosidad en el trazo. Fue espectacular, consiguiendo un apoteósico final con una estocada entera y consiguiendo dos orejas.

FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Las Ventas. Última de la Feria de Otoño. Corrida de toros. Lleno de No Hay Billetes en el aforo permitido en septiembre.
Toros de Alcurrucén. De noble y enclasado tranco el del buen primero;
Morante de la Puebla, oreja y silencio.
López Simón, ovación y silencio.
Ginés Marín, ovación y dos orejas.

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